La leche de soja se obtiene dejando en remojo los granos de
dicho vegetal, cociéndolos y colándolos. De esta manera, se obtiene un líquido
cremoso.
Si bien su producción se asimila a la del tofu, la
diferencia se manifiesta en el momento de la cocción del grano, ya que para
realizar esta bebida se debe dejar cocer un poco más.
Este tipo de leche, es una excelente alternativa para
suplir la obtenida de los vacunos, debido a su fácil digestión y a contener vitaminas, minerales
y proteínas. Además, no está compuesta ni por lactosa ni colesterol.
¿Por qué la lactosa suele dañar a algunas personas?
La leche materna es la mejor alimentación para los recién
nacidos y para los lactantes. Con el tiempo se va complementando con verduras,
frutas, frutos secos, cereales y legumbres.
El aparato digestivo del bebé está preparado
para ingerir leche materna durante el período de lactancia, pero después las
enzimas que metabolizan la leche desaparecen. Por este motivo, los adultos y
ancianos suelen presentar intolerancia a la lactosa.
Los lácteos generan mucosidad debido a su PH ácido y suelen
ser causantes de las alergias. La única manera de no contraer el problema antes
mencionado, es evitando los productos derivados de la leche común.
Los dolores de cabeza, óseos y de articulaciones, aumentan
especialmente en las personas que consumen lácteos. Caso contrario ocurre
cuando uno se alimenta con leche de soja.
Esta bebida vegetal es una gran fuente de proteínas,
vitaminas B y hierro. Además, muchas marcas de este tipo de leche añaden
nutrientes adicionales, como calcio, vitamina D y vitamina B12.
Utilidades:
Una vez abierta, debe conservarse en el frigorífico y
consumirse en una semana. Su aspecto es parecido a la leche de vaca, pero su
sabor resultará extraño las primeras veces que se consuma.
Se puede tomar esta bebida con cereales en el desayuno, fría
o caliente, e incluso utilizarla en recetas donde se emplee leche vacuna. En cuanto
a los niños, es recomendable que la beban para cuando crecen un poco, dado a que
contiene azúcares flatulentos, que les pueden resultar difíciles de digerir.
¿Cómo hacer leche de soja?
Ingredientes:
- Tiempo de preparación: 10 minutos
- Tiempo de cocción: 1 hora aproximadamente
- Tiempo adicional: 1 día, 12 horas (de remojo)
- Cada una taza de granos de soja, tres de agua
Preparación:
En el bol, remojar en agua los porotos de soja por 36 horas
más o menos, cambiando el agua cada 8 para que no fermente. Al realizar el
último cambio, cuidar que la proporción sea de una parte de poroto por tres de
agua.
Procese los porotos de a tanda, con el agua de remojo. Vertir
la mezcla en la olla y llevar a fuego medio/alto hasta que hierva. Luego, bajar
el fuego a lento y cocinar, revolviendo de vez en cuando por el espacio de 1 hora.
Si lo desea, durante la cocción de la leche le puede agregar
ralladura de limón para aplacar el sabor a porotos, ya que es una leche
natural. Retirar del fuego y dejar entibiar a temperatura ambiente. Posteriormente,
colar revolviendo constantemente la mezcla, para que filtre bien.
Debe recordar que es una leche natural, sin conservantes,
saborizantes, aditivos y/u otras sustancias "permitidas" por lo tanto
se conserva poco tiempo aún refrigerada.
Beneficios:
Es rica en magnesio, útil en personas hipertensas, problemas
cardíacos y artrosis, y ayuda en la asimilación del calcio. Además, su
contenido en hierro también es ciertamente alto, al igual que el zinc, que
ayudan a mejorar la digestión de las proteínas, siendo asimismo una fuente
realmente buenas de vitaminas del grupo B, especialmente vitamina B6 y ácido
fólico.
La soja es una planta leguminosa que produce por hectárea,
más proteína utilizable que ningún otro tipo de cosecha. Las semillas contienen
una proporción muy alta de proteínas, que representan el 35% de su contenido
calórico total.
Y lo mejor es que la calidad de sus proteínas es muy alta,
equivalente a las de las proteínas de origen animal. Desde hace varios años, se realizaron muchas investigaciones que señalan que las proteínas de la soja reducen los
triglicéridos y el colesterol (Colesterol Total, Colesterol-LDL y
Colesterol-VLDL) hasta un 15% más que las dietas tradicionales que limitan la
ingesta de grasas y colesterol.
Las proteínas de la soja también reducen la velocidad de la
oxidación con oxígeno del colesterol, factor muy importante en la génesis de
las aterosclerosis. Además, la isoflavona genisteína disminuye la agregación
plaquetaria.
Respecto a la osteoporosis los efectos también son muy
favorables, ya que las proteínas animales, ricas en aminoácidos azufrados, favorecen
la descalcificación al estimular la eliminación urinaria del calcio. La
sustitución de estas proteínas por las de la leche de soja inhibe ese proceso y
ayuda a conservar el calcio corporal. Además las isoflavonas impide el proceso
de destrucción ósea.
Los ácidos grasos que contiene son poliinsaturados:
linoleico, linolénico y araquidónico, ácidos grasos esenciales del tipo omega 3
que abundan en el pescado. Su déficit produce retraso en el crecimiento,
enfermedades de la piel y alteraciones nerviosas. No contiene colesterol.
Las isoflavonas son estrógenos vegetales,
que poseen una acción estrogénica muy pequeña comparada con la de los
verdaderos estrógenos corporales.
Sin embargo, son buenos competidores de los estrógenos
bloqueando sus receptores específicos celulares, reduciendo de este modo, la
acción estrogénica. Se cree que en este mecanismo radica la comprobada acción
protectora de la soja frente al cáncer de mama en las mujeres.
Las isoflavonas de la soja, como la genisteína, son capaces
de inhibir los cultivos de células cancerosas. Aunque hacen falta más estudios,
los científicos opinan que un vaso al día de leche de soja, es capaz de reducir
significativamente el riesgo de contraer ciertos tipos de cánceres.
No contiene ni lactosa, ni azúcar, ni colesterol, siendo una
alternativa perfecta para personas intolerantes a la lactosa.
A continuación, mirá cómo se elabora la leche de soja:
Fuentes:
- http://www.alimentacion-sana.com.ar
- http://www.enbuenasmanos.com
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